Tijuana.- Multas de entre 450 y mil 300 pesos, impondrá la policía municipal a las personas que no utilicen cubrebocas en espacios públicos, como el transporte, centros comerciales y oficinas de gobierno, en donde no haya forma de mantener la sana distancia.
La medida entrará en vigor a partir de su publicación, lo que podría ocurrir dentro de una semana.
En sesión extraordinaria de cabildo, se votó a favor de esta iniciativa que desde el pasado mes de julio estaba siendo analizada en comisiones.
Fueron dos propuestas las que se presentaron, una por parte del regidor Adrián González y otra por parte de la regidora Mónica Vega Aguirre.
La edil explicó que la aplicación de multas a quienes no porten cubrebocas obedece a la necesidad de frenar la cadena de contagios que ha causado no solo que los hospitales estén al borde del colapso, sino muertes, lo que ya se ha visto reflejado en la saturación de las funerarias.
Rechazó que se trate de una medida recaudatoria, porque lo ideal es que todas las personas usen cubrebocas si están en espacios públicos y muy cerca de otras, ya sea en las filas de oficinas de gobierno, de comercios, o bien a bordo de una unidad del transporte público.
“Fue algo complejo, porque se tenía que encontrar un punto medio, que no fuera un tema recaudatorio y que fuera para concientizar y responsabilizarnos, porque no solo el gobierno, los ciudadanos también tenemos que disminuir esta cadena de contagios en medio de la emergencia sanitaria”.
Con las modificaciones al bando de policía, se amonestará a la persona que se encuentre en espacios públicos sin portar cubrebocas, sobre todo donde haya aglomeraciones; no aplica para quienes viajen en vehículos particulares.
Si no atiende la recomendación, será presentado ante un juez calificador, que le podrá imponer una sanción económica de entre cinco y 15 UMAS, es decir, de entre 450 y mil 300 pesos.
En caso de que el ciudadano manifieste que no cuenta con recursos para pagar la multa, se podrá permutar por trabajo comunitario.
No obstante, si quien infringe la nueva norma si es reincidente, tendrá que cubrir el monto fijado por el juez y no podrán pagar el mínimo.
Con la aprobación de este dictamen, el Ayuntamiento de Tijuana está obligado a generar campañas de difusión para el uso del cubrebocas, en el que remarque la importancia de portarlo y la forma correcta de hacerlo.
Asimismo, se exhorta a Tesorería Municipal para que dentro de 15 días informe sobre la viabilidad para la compra de cubrebocas, para repartirlos de manera gratuita en la ciudad.
Se prevé que lo que ingrese de las multas pueda ser etiquetado para ese fin.
Para que la medida entre en vigor, deberá ser publicado en el periódico oficial o en la gaceta municipal, lo que podría ocurrir a más tardar dentro de una semana.
La regidora Mónica Vega reconoció que esta medida va en contra del lineamiento federal y estatal, que no contempla acciones punitivas para quien no porte el cubrebocas, pero señaló que como Ayuntamiento son la primera autoridad y tienen facultades para tomar acciones que conlleven a proteger la vida.
En su momento, recordó, la instalación de los filtros del alcoholímetro tampoco fue bien recibida por un sector de la población y se dijo que tenía fines recaudatorios, pero ha dado resultados en la reducción de accidentes de tránsito y muertes por esa causa.
A estas alturas de la pandemia, remarcó que sigue habiendo ciudadanos renuentes a utilizar el cubrebocas, cuando se ha demostrado que son un aliado para frenar los contagios en espacios públicos.
“Todavía hay gente que se molesta cuando algunos comercios solicitan la utilización del cubrebocas, lo mismo pasa en el transporte. Es importante que entendamos que en estos momentos en la ciudad de Tijuana es obligatorio, esta no es una medida recaudatoria, tiene que ver con sensibilizarnos, asumir nuestra responsabilidad en medio de esta pandemia”, recalcó.
Esta medida quedará sin efecto una vez que la entidad llegue a semáforo verde, lo que será determinado por el Consejo de salubridad.
La regidora inicialista adelantó que va a haber personas que no van a estar de acuerdo, pero también hay quienes están a favor de cuidarse y de cuidar a los demás.
