Tijuana.- Aunque en este proceso electoral nuevamente levantan el brazo de un candidato emanado del Partido Acción Nacional (PAN), la Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM) regresa a sus orígenes priistas gracias a la alianza Va x BC, conformada por el PAN, PRI y PRD.
Este jueves, líderes de la agrupación obrera manifestaron su apoyo al aspirante a la alcaldía de Tijuana por la coalición tripartidista, Jorge Ramos Hernández, pero el espaldarazo no fue gratuito.
Pedro Sepúlveda, secretario general de CROM en Baja California, hizo una petición pública para que trabaje por la regulación y habilitación de espacios exclusivos para las “paradas” de unidades del transporte público que afectan en la movilidad de sus agremiados.
A nivel nacional, la CROM se ha distinguido por incursionar en la vida política, ya sea con la colocación de candidatos o respaldando a perfiles aliados.
Aunque todavía hace alrededor de una década formó parte de los brazos más importantes del PRI, junto con la Confederación de Trabajadores de México (CTM) y la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), al menos en Baja California se fueron sumando a otros colores.
La CTM liderada por Eligio Valencia Alonso, ex legislador local por el PRI y ex candidato a la senaduría por el PRI en 2012, marcó distancia del partido tricolor en el pasado proceso electoral local para acercarse con Morena.
Incluso el hijo del dirigente cetemista, Eligio Valencia Alonso, fue regidor primero en Playas de Rosarito y luego en Tijuana cobijado por el PRI, pero ahora forma parte de la planilla de Montserrat Caballero, candidata a la alcaldía de Morena, también para integrar parte del Cabildo pero representando a la Cuarta Transformación.
La CROC se mantiene ligada al PRI: su secretario general, Javier Merino Duarte, es militante priista y ha ostentado cargos públicos a través de este partido político.
También su hija Sol Merino es actualmente diputada federal suplente en funciones, luego que la titular, de la bancada priista, solicitara licencia en marzo de este año.
Respecto a la CROM, a nivel nacional la relación con los priistas data desde la campaña presidencial de Miguel Alemán Valdés; relación que se ha ido desgastando en muchos estados y Baja California no fue excepción.
En lo local, fue en 2013 cuando públicamente dijeron “adiós” al PRI y se adhirieron a la campaña del ex gobernador Francisco Vega de Lamadrid y el aspirante a la alcaldía de Tijuana, Alejandro Monraz.
Volvieron a sumarse al proyecto de Juan Manuel Gastélum Buenrostro cuando buscó la reelección aunque sin éxito y una vez más le apuestan al abanderado panista, que también es la “carta fuerte” del PRI, el partido que la CROM abandonó hace tiempo.
Al respecto, Pedro Sepúlveda señaló que junto a sus agremiados analizaron a los candidatos (y no a los partidos) para tomar esta decisión.
“No platicamos de partido, porque la verdad, ¿ya qué ideología hay dentro de los partidos cuando hemos visto cómo se suman unos y otros con ideologías bien diferentes?”, reconoció el líder obrero.
La CROM está compuesta por 20 mil trabajadores en Tijuana. El dirigente estatal dijo que aunque en los sindicatos “es clásico” que se les fuerce a participar en eventos y mítines, el apoyo que darán será voluntario.
Por su parte, Jorge Ramos Hernández se comprometió a trabajar en la seguridad de Tijuana, combatir el feminicidio e implementar un Programa de Repavimentación Integral (PIRE) en las colonias.
“Aprovecho para invitar a los demás sindicatos, trabajadores, comerciantes, transportistas, es un proyecto abierto para otros ciudadanos, integrantes de partido, estudiantes, para recuperar Tijuana”, puntualizó el candidato.