Tijuana.- A partir de esta semana, comenzará a operar la primera clínica privada para la interrupción legal del embarazo, bajo la premisa de que las mujeres tienen derecho a tener “hijos por elección, no por azar”.
Se trata del primer establecimiento médico en Baja California, desde que el Congreso del Estado aprobó una reforma por la que se despenaliza el aborto hasta las doce semanas de gestación, si así lo desea la mujer.
Araceli López Nava Vázquez , directora general de la Fundación Marie Stopes en México, explicó que son una asociación con más de veinte años trabajando en el país y hoy llegan a Tijuana para ofrecer un espacio digno y seguro para las mujeres que así lo decidan.
Los procedimientos, agregó, son acorde a los lineamientos estipulados por el Gobierno de México, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y pueden ser médicos, con misoprostol y mifepristona -ambos disponibles en el país-, o por aspiración manual endouterina.
El único requisito que les piden es hacer cita, sin restricciones en la edad, aunque de acuerdo con López Nava, la edad promedio de quienes acuden a interrumpir su embarazo es de 27 años.
“Muchos tienen ese estigma de que llegan muy mal y no es así; las mujeres vienen a ejercer un derecho y vienen en todas las situaciones, desde la jovencita que está estudiando y no coincide con su plan de vida, la que tiene tres hijos y no quiere tener más o la que fue violentada”, señaló la directora de Fundación Marie Stopes.
Este centro médico se ubica en la Zona Río, sobre el bulevar Paseo de los Héroes.
Aunque en entrevista omitieron mencionar costos, en la página de internet de la Fundación detallan que dependiendo del método, los precios pueden variar desde los mil 500 a los 7 mil pesos y es que en algunos casos, el aborto médico se realiza desde casa.
Araceli López Nava Vázquez insistió en que el precio no se compara en nada a los del vecino estado de California, pero hay apoyos para quien no pueda cubrir el monto.
“El lema para nosotros es que ninguna mujer se quede sin acceso, el año pasado otorgamos más de 6 mil subsidios a nivel nacional; cuando las mujeres no cuentan con dinero, las apoyamos”, mencionó la directora.
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La clínica cuenta con dos consultorios, camillas de descanso con capacidad hasta para cinco pacientes y una sala para realizar la interrupción del embarazo.
De acuerdo con sus directivos, se empatan con lo solicitado por la OMS y la Secretaría de Salud. También en el acceso principal, se observan algunos permisos locales.
Alfonso Gerardo Carrera Rivera Palacio, ginecólogo y director médico de Fundación Marie Stopes, señaló que tanto el aborto con medicamento, como el de aspiración manual endouterina, son de riesgo mínimo para la persona gestante.
“El aborto con medicamento es un proceso, puede llevar de unas horas a un par de días”, indicó, mientras que la aspiración endouterina tiene una duración de apenas unos minutos y quien se lo practique, puede ir a casa después sin mayor molestia.
“Estos estigmas como de que la mujer sangra mucho o se lastima, no son ciertos; existe baja tasa de complicaciones si tenemos un enfoque como el de la OMS, de aborto seguro”, dijo Carrera Rivera Palacio.
Agregó además que “el aborto seguro tiene un efoque de salud pública, se debe actuar antes de una complicación, el aborto ocurre conmigo, sin mí y a pesar de mí, pero, ¿cómo logramos que las mujeres sean lo más seguro posible?, de eso se trata el enfoque”.
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El pasado 29 de octubre, el Congreso del Estado de Baja California aprobó por mayoría una reforma al Código Penal, la Ley General de Salud y la Ley de Víctimas, por lo que se permite la interrupción del embarazo antes de las doce semanas de gestación.
Y quien se someta a un aborto después de este plazo, ya no recibirá una pena tan severa, sino de tres a seis meses de cárcel o trabajo comunitario.
Antes, la pena era de hasta 5 años y solo se permitían estos procedimientos en caso de enfermedad, riesgo de muerte o por una violación.
Ahora, el Código Penal también excluye de sanciones abortar por “la libre voluntad de la mujer embarazada, siempre que esté dentro de las primeras doce semanas.
“Para nosotros, el aborto debe ser aprobado siempre que la mujer lo decida. Sin embargo, hay que apegarse a los lineamientos legalmenta y doce semanas es un avance para las mujeres en el país y en los estados donde está legalizado”, mencionó López Nava.
La directora de la Fundación Marie Stopes México señaló que “nosotros estamos en estados donde está legalizado el aborto” y hasta el momento, tienen cinco centros médicos en Ciudad de México y uno en Oaxaca, en Chiapas y Veracruz.
Esta sería el primer centro de Baja California, entidad en la que estiman, hay una demanda o necesidad de hasta 50 mil abortos por año, del millón que se registra a nivel país.
“Hay mujeres que lo necesitan siempre, pero también hay una deuda de la sociedad mexicana con las adolescentes, somos los países con más embarazos con adolescentes y es una prioridad poderles ayudar”, agregó el director médico, Carrera Riva Palacio.
Además de la interrupción legal del embarazo, este centro médico ofrece otros servicios de salud reproductiva y sexual, prevención de enfermedades, colocación de dispositivo intrauterino, vasectomías, entre otros.
En México, la Suprema Corte de Justicia de la Nación declaró inconstitucional la criminalización de la interrupción voluntaria del embarazo y aunque se trataba de la discusión del Código Penal de Coahuila, el criterio se aplica a todo el país.
En Baja California, las reformas de octubre pasado comprometen al Estado a facilitar la interrupción voluntaria del embarazo, cuando la mujer o persona gestante así lo decida, siempre que no pasen de las doce semanas.
Aunque el 24 de junio del presente año, la Suprema Corte de Estados Unidos anuló la sentencia Roe contra Wade, por la que se garantizaba el derecho al aborto, la Fundación descartó que haya un éxodo de norteamericanas a Baja California para ejercer aquí su derecho.
Antes de esto, existen también las redes de acompañamiento como la Colectiva Bloodys y Projects Red Tijuana, las cuales facilitan los protocolos con misoprostol y acompañan a mujeres que se practican el aborto bajo este método.
Cristal Pérez, fundadora y miembra de Bloodys, dijo que al mes acompañan a entre 200 a 300 mujeres, la mayoría de Tijuana, en la interrupción de su embarazo.
Aunque dijo que no tenía conocimiento de la habilitación de esta clínica, “estamos a favor de sumar, pero no nos sumaron” y agregó que buscarán conocer si pueden acercar a personas que deseen interrumpir su embarazo aquí en esta clínica.
