Tijuana.- Jesús García Castro, actual director de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT) en contubernio con el líder de los burócratas, consiguió plazas sindicales a mujeres cercanas a él, entre ellas, a sus secretarias y a su joven sobrino, a quien con lo contrató con un sueldo de más de 76 mil pesos por desempeñarse como su “asistente”.
Así lo demuestran documentos en poder de PUNTO NORTE emitidos por la propia CESPT y el Sindicato de Burócratas que encabeza Guillermo Aldrete Casarín, dirigente que traficó las plazas con el titular de la paraestatal a cambio de sostenerse frente al gremio en medio de un litigio que puso en riesgo su nombramiento.
En los próximos días, un grupo de burócratas solicitarán un procedimiento en contra de Jesús García Castro para que sea expulsado del propio sindicato del cual forma parte.
Se trata de una lista de siete nombres, en su mayoría mujeres, que fue dada por el director de la CESPT para que sean beneficiadas con una plaza sindical de por vida, la cual las dota de privilegios laborales, como horarios, prestaciones, aumentos en salario, entre muchos otros.
Estos hechos evidencian el posible nepotismo y corrupción por parte del director de la CESPT y del dirigente del sindicato, lo cual está siendo documentado por un grupo de burócratas para interponer quejas y denuncias formales al tratarse de hechos que constituyen un delito y que podría alcanzar varios años de prisión o sanciones administrativas.
La lista de los próximos basificados del director de la CESPT la encabeza su sobrino, Miguel Ángel Montoya García.
Montoya García aparece dentro de los archivos de la CESPT como “empleado de confianza” de reciente ingreso, con un primer registro de sueldo a finales de 2023, en la fecha en que su tío tomó protesta como director, luego de ser destituido del gobierno municipal.
Montoya García ocupa el puesto de “asistente” de su tío Jesús García con un pago bruto de 76 mil 701 pesos al mes, incluyendo una compensación.
Según base de datos del gobierno federal, el sobrino del priista ahora acogido por Morena, no cuenta con título profesional, por lo que carece de estudios universitarios acreditados.
Aun así, García Castro lo metió a su nómina días después de llegar al cargo con un sueldo bruto de 47 mil 299 pesos y una compensación bruta de 29 mil 402 pesos mensuales.
El plan de basificación de los cercanos de Jesús García Castro incluyó a su asistente Nimsy Yadanira Pérez Cerón, una mujer de 43 años, quien pasó de ser auxiliar telefónica a asistente del director.
De acuerdo a la Plataforma Nacional de Transparencia y a documentos oficiales de la CESPT, Nimsy Yadanira ocupaba el puesto de operadora telefónica con un sueldo de 8 mil 749 pesos mensuales en 2022, y actualmente (según último reporte de la paraestatal) la mujer posee un pago bruto mensual de 32 mil 514 pesos al mes, integrado por 23 mil 514 pesos de sueldo y una compensación de 9 mil pesos mensuales al mes.
En este periodo, la asistente de García Castro pasó de estar adscrita a la “coordinación de atención telefónica” a la “Dirección general”.
De acuerdo a una solicitud de información pública a la CESPT, Nimsy Yadanira obtuvo su base sindical apenas el 19 de agosto.
Sin tener mérito de antigüedad, también se otorgó base sindical a María Elena Martínez Flores, una líder de colonia de la Zona Este, por la que Jesús García abogó con el presidente del sindicato para que se le regalara la prestación.
La mujer fue dada de alta en la CESPT apenas a finales de 2022 y obtuvo su plaza en sólo dos años, cuando existe personal con 20 o 30 años en espera de un espacio.
Al igual que la base dada a Nimsy, la de María Elena Martínez fue registrada el 19 de agosto.
La señora María Elena tiene dos hijos en la nómina de la CESPT, una de ellas es Blanca Estela Martínez Flores, a quien también se le dará una plaza sindical por petición del director.
Blanca Estela ingresó a la CESPT apenas en 2023 y tiene el puesto de “auxiliar administrativo” en la coordinación de control patrimonial con una percepción bruta de 56 mil 129 pesos, considerando sueldo de 37 mil 13 pesos más una “compensación” de 19 mil 116 pesos mensuales).
Otros casos son los de Flor Gabriela Cortez Jocobi y Samaria Amelie Rodríguez Mendoza, quienes también figuran en la lista que envió Jesús García a Guillermo Aldrete para que se les otorgara una base sindical, ambas son sus secretarias.
Las dos subordinadas del director de la paraestatal, de acuerdo a las obligaciones de transparencia de la CESPT, únicamente cuentan con unos meses de “antigüedad” dentro de la CESPT, pues su ingreso fue apenas este año.
Flor Gabriela Cortez Jocobi, a su ingreso a la paraestatal en marzo de 2024, consiguió un sueldo mensual bruto de 25 mil 404 pesos, más una compensación de 10 mil pesos al mes, 35 mil 404 pesos brutos en total bajo el puesto de “secretaria directiva”.
Por su lado, Samaria Amelie, dada de alta en junio de 2024 en la nómina y con exactamente el mismo cargo de “secretaria directiva”, adscrita también a la dirección general, percibe un sueldo mensual bruto de 15 mil 404 pesos, la mitad que Flor Gabriela, según la Plataforma Nacional de Transparencia.
De acuerdo a bases de datos de la Secretaría de Educación consultadas por PUNTO NORTE, ninguna de las secretarias del director cuenta con cédula profesional universitaria.
Otro de los beneficiados con una base sindical es Cuauhtémoc Álvarez Inzunza, quien ocupa el puesto de “fotógrafo” asignado al director Jesús García Castro.
El funcionario fue contratado en la CESPT una vez que el ex priista llegó al cargo de primer nivel y actualmente, con sólo meses en la dependencia, Cuauhtémoc tiene una remuneración de 57 mil 896 pesos brutos al mes, de acuerdo a la última actualización de Recursos Humanos que comparten en la PNT (integrado por el sueldo y una compensación de 20 mil pesos mensuales).
Los archivos oficiales de la CESPT revelan que Cuauhtémoc tiene un puesto bajo la denominación “Profesionista especializado”, pero el registro de profesionistas del gobierno federal arroja que este funcionario no cuenta con cédula profesional, universitaria ni técnica.
De acuerdo a las redes sociales de ambos, Cuauhtémoc Álvarez y Jesús García Castro mantienen una amistad personal bastante sólida.
Al menos así lo demuestran públicamente, en abril, los dos comparten una foto en Facebook publicada por el empleado de la CESPT, quien fue contratado en la paraestatal a la llegada de Jesús García Castro.
“Tener amigos es lo mejor de la vida, pero contar con amigos de esta magnitud es una bendición”, se puede leer en la foto que el empleado de la CESPT publicó abrazando a su jefe.
Otro amigo personal de Jesús García, a quien se le tramita la base sindical es Demetrio Ascención González Rodríguez, quien fue contratado apenas en junio en la CESPT y ya se prepara para la prestación a la que cientos de empleados buscan a lo largo de su vida laboral y no la consiguen.
Demetrio Ascensión aparece en la nómina como “auxiliar administrativo” adscrito al director de la CESPT, con una percepción bruta de 19 mil 778 pesos al mes, de acuerdo al portal de información pública.
Al igual que el resto de amigos y familiares beneficiados por Jesús García Castro y Guillermo Aldrete, Demetrio tampoco cuenta con cédula profesional, ni experiencia en administración pública. Su único registro en sitios gubernamentales es que cursó su secundaria abierta en el programa del INEA (Instituto Nacional para la Educación de los Adultos).
Estas entregas de bases sindicales han generado inconformidad entre los agremiados y empleados de las dependencias, pues se ha pasado por encima de trabajadores que cuentan hasta con 30 años de servicio esperando una plaza sindical.
Desde el sindicato, se sostiene la versión de que Jesús Castro, a cambio de las plazas para su sobrino y “amigas” le reconoció su calidad de líder de la burocracia a Guillermo Aldrete, pues éste se encuentra en medio de un proceso judicial en donde ha perdido legitimidad y representación por medio de un juicio.
Los burócratas inconformes preparan un procedimiento en contra de Jesús Castro, pues éste obtuvo una plaza sindical en los tiempos del PRI-Gobierno. La idea es iniciar un procedimiento por medio de la Comisión de Honor y Justicia del Sindicato por actuar en contra de los intereses de la base y lograr su expulsión del gremio.
En lo que va del año, el titular de la CESPT ha entregado 37 bases sindicales a trabajadores de la CESPT.
Mientras que desde noviembre de 2023, cuando fue nombrado al frente del organismo, García Castro ha contratado, entre personal de confianza y eventual, a 58 personas, entre quienes destaca Antonio Serret.
El también ex priista, quien fue regidor de Playas de Rosarito precisamente con el PRI, fue acogido por Morena, partido que lo hizo coordinador de campaña en 2018 en ese municipio y, en el gobierno de Jaime Bonilla, en 2020, se le nombró delegado del Instituto de Movilidad Sustentable (IMOS).
El artículo 47 de la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos del Estado de Baja California establece entre las prohibiciones a las que estarán sujetos los servidores públicos, en el desempeño de sus funciones, empleos o comisiones, “intervenir o participar indebidamente en la selección, nombramiento, designación, contratación, promoción, suspensión, remoción, cese o sanción de cualquier servidor público, cuando tenga interés personal, familiar o de negocios en el caso, o pueda derivar alguna ventaja o beneficio para él o para las personas a las que se refiere la fracción anterior”.