Tijuana.- A más de un mes de que el general Gilberto Landeros Briseño asumiera la titularidad de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del Estado, ésta se encuentra prácticamente desmantelada y sin dirección: sigue funcionando con los mismos mandos policiacos que le heredó la administración anterior.
Al haber transcurrido más de 30 días desde la creación de la dependencia estatal, la corporación de la Secretaría (antes llamada Guardia Estatal) continúa operando sin cambios y con los mismos encargados nombrados desde que esta área estaba en manos de la entonces Fiscalía General del Estado, encabezada anteriormente por Guillermo Ruiz Hernández.
Los agentes de la extinta Policía Estatal Preventiva o GESI (la cual se llamará Fuerza Estatal) no tienen siquiera los logos de la nueva corporación en sus uniformes, pues los nuevos escudos no han sido presentados de manera oficial.
Ante la falta de insignias de la nueva corporación, los agentes patrullan Baja California únicamente con el pantalón y camisa azul, pero sin ningún distintivo.
Landeros tampoco ha nombrado un director de la fuerza policiaca, ni subdirectores, comandantes, sub comandantes ni jefes de grupo.
Consultados por PUNTO NORTE, varios agentes confiaron que desde que se creó la Secretaría de Seguridad no han recibido instrucciones de sus operaciones policiacas, por lo que se limitan a cumplir con su horario laboral.
“No conocemos al nuevo secretario, no se ha presentado con la corporación, ni nos han dicho cómo nos llamamos, seguimos con los mismos jefes que estaban antes, nos pagan en cheque porque aún no han definido con qué banco nos pagarán la nómina”, contó uno de los agentes entrevistados.
Otro de los policías estatales explicó que las condiciones laborales han empeorado con la llegada de la Secretaría.
Por ejemplo, que se dificulta abastecer de combustible y que las condiciones de las patrullas son una situación insostenible: “solo hay como 10 unidades para todo el estado y son realmente inservibles, si vieran como están, de todas las unidades ninguna sirve”, explicó.
Otra de las áreas que se encuentra acéfala y sin funcionar es la Dirección de Inteligencia, la cual tenía bajo sus atribuciones el análisis de datos, identificación de zonas de mayor incidencia delictiva, objetivos criminales e investigación policial.
Desde el 1 de noviembre, los encargados de esa área -en su mayoría elementos de la Guardia Nacional que arribaron junto con Carlos Alberto Flores, ex comisionado de seguridad en el Estado- abandonaron sus cargos y hasta la fecha no se ha retomado sus actividades.
Israel Vega Rodríguez fue el coordinador de la GESI en el oscuro periodo de Carlos Alberto Flores, quien junto con el cambio de gobierno desertó de su encargo, abandonando también el Estado.
Cuando fue destituido como comisionado Carlos Flores, Vega Rodríguez dejó el puesto y el encargado de despacho del área policiaca recayó en el entonces Oziel Arturo García Hernández, ex director de la extinta Policía Estatal Preventiva (PEP) en la administración de José Guadalupe Osuna Millán y quien fungía, hasta finales de 2021 como segundo a bordo de la corporación bajo la clave 02.
Oziel García actualmente sigue siendo el mando más alto de la Fuerza Estatal, por lo cual funge prácticamente como “director”.
Ante la ausencia de un organigrama, actualmente debajo de Oziel García, se encuentran únicamente tres comandantes de plaza, uno por municipio: Roberto Cervantes Díaz en Ensenada, Francisco Ortiz en Tijuana y Rodrigo Rodríguez en Mexicali. Tecate y Rosarito tampoco tienen nombramiento.
