Tijuana.- El alcalde Arturo González Cruz busca que en la sesión de Cabildo a desarrollarse hoy, se vote la contratación de la empresa que construyó el estacionamiento subterráneo del Palacio Municipal.
Este fue clausurado hace 6 años y sería la misma empresa la que lo operaría los próximos 5 años por un monto de más de 10 millones de pesos. Esto sin que a los regidores se les haya entregado un dictamen que avale la seguridad de la infraestructura.
Esto provocó que los regidores solicitaran se removiera ese punto del orden del día, pero hasta hace unos minutos, el presidente municipal insiste en que sea votado. Los ediles piden que se les entregue más información sobre las condiciones del estacionamiento antes de tomar una decisión.
La empresa a contratar es Administradora de Obras y Concesiones, S.A. de C.V., para la renta de al menos 263 cajones en el estacionamiento subterráneo de Palacio Municipal. Cada espacio tiene un costo de 650 pesos por concepto de pension mensual. Esto significa que se erogarán casi 171 mil pesos mensuales por este servicio.
El contrato se firmaría por cinco años, por lo que la siguiente administración se vería comprometida a continuar el contrato, el cual resulta en un total de 10 millones 200 mil pesos.
Administradora de Obras y Concesiones es un consorcio conformado por varias empresas que en gobiernos panistas obtuvieron millonarios contratos por obras públicas, como Urbaca y Makro, fue señala como responsable en el gobierno de Jorge Astiazarán Orcí de fallas estructurales que incluso podían provocar un colapso.
Desde que el estacionamiento se inhabilitó, el Ayuntamiento rentaba un terreno para que empleados municipales estacionaran sus vehículos, al cual le llamaban “el gallinero”.
En octubre de 2014, el Ayuntamiento de Tijuana clausuró el segundo nivel y la cuarta parte del primer nivel del estacionamiento, debido a que se presentaban fallas estructurales visibles.
Aunque se realizaron los trabajos correspondientes de reparación por parte de la empresa, en septiembre de 2015 se volvió a clausurar ya que las fallas persistían, además de nuevas grietas, goteras y desniveles. Fue en ese momento que se clausuró la totalidad de las instalaciones.
Ahora, con la llegada del alcalde Arturo González Cruz, se retiraron todos los sellos de clausura y se permitió a la empresa reanudar operaciones.
