Tijuana.- La primera fase de Esperanto, nombre que llevará el que será el parque más grande de Tijuana, podrá disfrutarse en febrero de 2023 y entre otros atractivos, contará con un área de juegos infantil, una tirolesa y un mirador hacia la presa Abelardo L. Rodríguez.
Hoy, la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, supervisó los avances en la construcción, en cuya primera etapa se invertirán de 25 a 30 millones de pesos, de acuerdo a estimaciones de la Secretaría de Infraestructura y Desarrollo Urbano y Reordenación Territorial del Estado (SIDURT).
“Es parte de nuestras políticas de medio ambiente, pero también de prevención y de regeneración de espacios públicos. Este va a ser el parque más grande que va a tener Baja California, vamos a reforestar alrededor de 30 mil árboles. Las familias tijuanenses van a poder gozar de este espacio”, expresó la mandataria estatal ante medios de comunicación.
El espacio, cuya construcción inició en julio de este año, cuenta hoy con algunos espacios casi terminados, como un andador donde se plantarán árboles frutales y plantas nativas, también uno de varios miradores, así como las letras con el nombre Esperanto.
“Durante muchos años, los gobiernos dejaron de pensar en espacios públicos, en áreas verdes, en la calidad del aire y lo que estamos buscando nosotros es una inversión importante durante los próximos años”, añadió Ávila Olmeda.
La jefa del Poder Ejecutivo destacó la participación de organismos de la sociedad civil en el proyecto, como Nación Verde y ProNatura.
Marina del Pilar también explicó que los terrenos, los cuales suman una superficie de 40 hectáreas, “estaban desaprovechados”.
Esto a pesar de ser “el único espacio que le queda libre a Tijuana como un área verde. Ya no le queda más. Es la dimensión más grande que cuenta Tijuana y quizás esta zona metropolitana para que puedan disfrutar las familias y me siento muy contenta de impulsar este tipo de proyectos”.
De igual manera, la gobernadora recordó que el Congreso del Estado se encuentra estudiando una iniciativa para prohibir a empresas fraccionadoras vender los espacios que por ley deben destinar a áreas verdes para que las colonias tengan más espacios de esparcimiento, como lo han venido haciendo.
Mientras que el coordinador de Programas de Regeneración de Espacios Públicos, Carlos Torres Torres, detalló que Tijuana solo tiene entre 0.8 y un metro de áreas verdes, cuando la Organización Mundial de la Salud recomienda por lo menos 12 metros por habitante.
“Ése es el reto y eso es lo que recibió la gobernadora. Este espacio es 3.5 veces más grande que el Parque Morelos, donde hay aproximadamente 4 mil árboles, aquí tan solo la primera etapa va a tener 30 mil árboles”.
Por su parte, el arquitecto Raúl Cárdenas Osuna, describió esta primera etapa como “una serie de intervenciones que tienen que ver con el clima, el paisaje y el medio ambiente”.
Esta primera fase contempla también la construcción de un anfiteatro, el cual será poroso para que “el agua se pueda estar captando y regenerando”, indicó Arturo Jaramillo Espinoza, titular de SIDURT.
Por su parte, Octavio López Coronel, director de la asociación civil Nación Verde, explicó que el parque también contará con cinco árboles rescatados, esto es, que fueron removidos de lugares y de no haber sido trasladados a su nuevo hogar, habrían muerto.
Entre ellos, destaca un árbol de más de 40 años de vida que se encontraba en el fraccionamiento El Soler.
El activista explicó que mediante un sistema de riego, se les dará mantenimiento a la mayoría de las plantas y el resto recibirá agua mediante pipas.
“Lo que se muera, lo volvemos a plantar, en una reforestación es así, cada año se planta. Estamos pensando en la siguiente generación, es un legado verde, que continuará en unos 100 años”, agregó López Coronel.
Los beneficios ecosistémicos de estos 30 mil árboles se traducen en la captación de 800 toneladas de carbono al año y 14 millones 156 mil litros de agua anuales que se van infiltrar, esto es que entran al subsuelo por medio de los árboles y alimentan los mantos.
Octavio López añadió que habrá árboles frutales para el andador y plantas nativas en cerros y taludes, tales como mezquites y palo verde, las cuales permitirán estabilizar el terreno, pero también para animales polinizadores.
Por su parte, Rodolfo Márquez Berber, director general de Corporación del Fuerte, Embotelladora de Coca-Cola, anunció que la empresa aportará 10 mil árboles, los cuales cubrirán una superficie de diez hectáreas.
El representante de la empresa explicó que se trata de las acciones que Corporación del Fuerte lleva a cabo en la región para conservar el medio ambiente y contribuir a las políticas públicas de cuidado ambiental.
Por último, el secretario de Infraestructura, Arturo Jaramillo Espinoza, explicó que el parque en su totalidad, contempla una inversión final de entre 150 y 200 millones de pesos.
Explicó que aún se encuentran definiendo algunas amenidades y partes, por ejemplo, un puente volado, una entrada de agua y una segunda tirolesa.
Egresada de la Licenciatura en Comunicación de la Universidad Autónoma de Baja California. Especialidad en Periodismo Policial y Judicial de la Universidad Iberoamericana, Campus Ciudad de México. Más de 12 años en medios de comunicación de México y Estados Unidos, como Semanario Zeta, Sin Embargo o la agencia española EFE.
