Mexicali.- Amenazarla con “no hacer absolutamente ningún movimiento sin consultármelo”, exigirle 20 mil pesos en vales de gasolina e incluso seguirle en su vehículo para tomarle fotografías, es parte de las razones por las que la diputada Daylín García, la única representante de Movimiento Ciudadano en el Congreso del Estado, fue denunciada por su suplente, Claudia Huerta, por violencia política.
Huerta, quien es activista en concientización del autismo, interpuso una queja ante el Instituto Estatal Electoral de Baja California (IEEBC) por violencia política en contra de la legisladora, quien busca reelegirse como diputada del distrito 2 local.
Ambas mostraban de manera pública en sus redes sociales una fuerte amistad al grado de vestirse iguales la mayoría de veces y reconocerse mutuamente los talentos y capacidades, compartiendo fotografías y su trabajo juntas, sin embargo, Huerta dio a conoce el mal trato, el intento de desvíos de recursos público y el acoso que sufrió por parte de la diputada de Movimiento Ciudadano quien busca actualmente reelegirse.
De acuerdo a una serie de grabaciones de conversaciones entre ambas, la diputada del MC advirtió a su suplente: “tú vas a entrar y vas a ser diputada porque yo quiera”, a pesar de que constitucionalmente, Huerta tiene el mismo derecho que García de ser legisladora.
El 1 de abril de 2023, Daylín García hizo efectiva su licencia como diputada de la XXIV Legislatura de Baja California, en su afán de pregonar que, aunque la ley le permite continuar como diputada en funciones y hacer campaña, ella no haría lo mismo que otros partidos.
La diputada de MC aseguró al momento de pedir licencia que “en congruencia, considero que quienes quieran ocupar una posición pública, no deben estar haciendo del recurso público”.
Sin embargo, ya para entonces, según una de estas conversaciones grabadas en audio, Daylín estaba dudando si retirarse o no de su cargo, para luego dejar sin efecto su licencia y así para evitar que su suplente continuara en la silla legislativa.
“Si yo tuviera la confianza plena de que no vas a hacer absolutamente ningún movimiento sin consultármelo, pues entonces digo, bueno, pues sí, no hay pedo… Me da miedo dejarte de diputada porque no sé quién te está asesorando”, se le escucha decir en una de las conversaciones.
De acuerdo a la grabación, la representante de MC, condicionó a su suplente a no utilizar su partida presupuestal, pese a que no hay un impedimento legal para ello, bajo la justificación de que busca evitar rumores de que dicho dinero sería utilizado para su reelección.
No obstante, Claudia denunció ante medios de comunicación, posteriormente a que se dieran a conocer las grabaciones, que Daylín la acosó para ejercer control sobre ella y hostigarla para que recursos provenientes del Congreso del Estado fueran desviados a su campaña.
En la conversación grabada se escucha decir a la diputada del Movimiento Ciudadano dirigirse a su suplente de manera prepotente: “Entonces quiero ver si entiendes esa parte ¿La entiendes? Porque la diputada puede no dejarte ser o en cualquier momento quitarte, pero yo meto licencia y en el minuto que yo quiera, mando un oficio solicitando mi reincorporación. Y tú te vas”.
Luego de esto, Daylín cumplió su amenaza. El 24 de abril, antes de que se cumpliera un mes de que su licencia se hizo efectiva, la diputada de Movimiento Ciudadano regresó al Congreso del Estado.
Apenas un día antes, Huerta había presidido un simposio por el Mes del Autismo, un tema del que es experta.
“Manifesté mi interés por ingresar (al Congreso) el 1 de abril porque es el mes del autismo y ella sabía que yo tenía una agenda lista y preparada junto con mi colectivo y los grupos de papás, ella no deseaba que yo trabajara ni que ejerciera nada porque le interesaba más su campaña”, señaló Huerta tras interponer el recurso ante el IEEBC.
La suplente de la diputada detalló que Daylín “incluso quería que volviera a ser su suplente y que le siguiera ayudando (en su campaña), lo cual me negué porque yo no quería perderme la oportunidad de seguir en el Congreso y llevar esos temas (sobre el autismo en niños)”.
De acuerdo con la diputada suplente, “cuando ella se da cuenta que yo realizo mesas de trabajo y el simposio, me empieza a presionar, a hostigarme, al grado incluso de seguirme en su vehículo con su pareja sentimental y tomarme fotos”.
Mientras Daylín García presumía en redes sociales su supuesta alegría por ver a su suplente tomar protesta, como lo describió en una publicación de Facebook, en la que aseguró “Clau, eres una gran persona y estoy segura que serás la mejor diputada, disfruta mucho esta nueva responsabilidad”, Huerta resaltó que vivía “un calvario”.
La suplente de Daylín aseguró que antes de tomar protesta, recibió “presión, amenazas, intimidaciones, referente al tema del ingreso de que yo pueda tomar protesta en el Congreso, me cambia la fecha, me amenaza”.
Una vez que Huerta logró tomar protesta en el Congreso del Estado, el hostigamiento por parte de García Ruvalcaba no terminó e incluso se extendió a más colaboradores, relató la también nutrióloga de profesión.
“Me está amedrentando para yo hacer extensa esta violencia hacia mis compañeras con temas, por ejemplo, bastantes compañeras ya no quisieron seguir laborando con ella por todo esto sucedido”, manifestó.
Y agregó sobre el intento de desvíos públicos a la campaña de la militante del MC: “me marcaba constantemente para que les pidiera su liquidación del Congreso porque ella decía que esa liquidación era para que trabajaran con ella en campaña, por lo cual yo me negué”.
La única sesión del Pleno del Congreso en la que Claudia Huerta pudo participar fue la del 18 de abril, en donde solicitaría la realización del simposio, en el cual participaron tanto asociaciones civiles como organismos gubernamentales y, sobre todo, personas con autismo y sus familiares.
Fue precisamente durante dicha sesión, relata Huerta, que Daylín “todo el día me estuvo hostigando, hablando por teléfono, mandándome mensajes, quería que me saliera de sesión del Pleno para que la acompañara a una junta de comunidad en relación a su campaña”.
Huerta asegura que se negó a abandonar la sesión, pero recibió una llamada telefónica suya durante uno de los recesos.
“Me regaña, me dice que no le contesto, que me tengo que salir, le digo que no me puedo salir, me dice ‘sí puedes y te estoy siguiendo en el canal de YouTube, ahorita que se termine la sesión, te voy a esperar afuera’”, recordó Huerta.
Y es que ese 18 de abril, recuerda la suplente que “(Daylín) se dio cuenta que habían salido los vales de gasolina y en la mañana me los había solicitado porque los quería para cubrir gastos de su campaña, a lo cual yo me negué”.
La diputada suplente aseguró que se trataba de 20 mil pesos en vales de gasolina.
“Me amenaza que me va a esperar afuera, yo ese día, decido hablar con ella, enfrentarla, ponerle un límite y decirle que no me esté hostigando, que me deje trabajar, que es mi derecho, que no me negaba a ayudarle a campaña, siempre tuve buena voluntad, pero le estaba dando prioridad a mi agenda”, afirmó.
También, ese 18 de abril, comentó Huerta, la diputada con licencia tuvo una reunión con niños con cáncer, “por lo cual también me regañó porque sólo fueron seis familias, a lo que yo le respondí ‘¿De dónde quieres que saque yo niños con cáncer?”.
En la misma conversación entre ambas, Huerta le pide a Daylín claridad sobre el tema de si le permitirá o no ingresar como su suplente al Poder Legislativo, pues si le ha perdido la confianza, como se lo manifiesta, entonces prefiere renunciar a su puesto como coordinadora de la casa de atención ciudadana de la diputada de Movimiento CIudadano.
En ese momento, Daylín cambia de actitud e intenta mediar con ella, explicándole que no es lo que busca, pero recordándole que ella es quien decide si puede ser diputada o no.
“Siempre me amenazaba que iba a meter un oficio y que iba a cancelar mi suplencia por yo no hacerle caso y no ayudarle y fue lo que hizo” recuerda Claudia.
Finalmente, la víctima de violencia que Daylín bloqueó, una vez que dejó sin efectos su nombramiento, el reembolso de los gastos que ella cubrió para realizar las mesas de trabajo y el simposio sobre autismo.
“Todo ese recurso que se necesitó, lo estuve apagando de mi bolsa, ingresé algunas facturas de reembolso a ver si podía, porque era mi derecho, a lo que tenía entendido, integré cuatro apoyos sociales, tampoco se me otorgó y contratos en asimilables para tener personal porque la diputada me había dejado sin personal y se me negó”, manifestó.
Aunque la candidata de Movimiento Ciudadano no se ha manifestado en sus redes sociales sobre la denuncia ni las conversaciones en las que se le escucha amenazando a su suplente, estuvo en un noticiero del Canal 66, en el que aceptó que la conversación era real.
Sin embargo, aseguró que su suplente se reunió con “otros partidos” y atribuyó a ello tanto la denuncia que interpuso en su contra como la difusión de la conversación que tuvieron juntas.
Daylín también evitó responder si se encuentra en funciones como diputada o no, pero en el sitio web del Congreso del Estado, sólo aparecen 24 de los 25 diputados, por lo que se confirma lo denunciado por Claudia Huerta respecto a que Daylín tramitó su expulsión del Poder Legislativo.
Incluso si Daylín García no está desempeñándose como diputada, los bajacalifornianos tienen un espacio menos de representación, pues la legisladora, quien llegó por la vía plurinominal en 2021, dejó vacante su curul, con tal de no permitirle a su suplente ejercer su derecho constitucional de asumirlo ante su ausencia.
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