Tijuana.- Baja California rebasó los mil casos confirmados de COVID-19, al acumular mil 047, además de que se ubica en segundo lugar a nivel nacional en defunciones, 136 hasta el último corte.
El secretario de Salud del Estado, Alonso Pérez Rico, informó que en las últimas horas confirmaron a 71 pacientes infectados, por lo que la entidad se mantiene en tercer lugar en cuanto a casos confirmados.
Tijuana sigue a la cabeza, con 588 casos de COVID-19, mientras que en Mexicali se llegó a los 392 confirmados y en Tecate a los 35.
Ensenada registra 17 casos positivos, Rosarito 11 y San Quintín cuatro.
Acerca de los decesos, informó que hubo tres más de ayer a hoy.
En Tijuana se han registrado 89, en Mexicali 36, en Ensenada cuatro, en Tecate cuatro, en Rosarito dos y en San Quintín uno.
Pérez Rico insistió en que los que más están perdiendo la batalla son los pacientes con comorbilidades, como los diabéticos, hipertensos, obesos y asmáticos, “que no tienen la suficiente fuerza vital para vencer al COVID”.
El grupo de edad que más decesos concentra son los mayores de 65 años, con 40 muertes y en segundo lugar el grupo de 45 a 49 años de edad, con 19 defunciones, seguido del grupo de 40 a 44, con 18 defunciones.
Respecto al número de casos sospechosos, son 516 los que están en espera de resultados, de los cuales 71 son de la Secretaría de Salud y 441 son derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el cual continúa enviando sus muestras a Ciudad de México va a recibir los casos confirmados con varios días de atraso.
Por institución, 460 casos confirmados están siendo atendidos por la Secretaría de Salud del Estado, 435 por el IMSS, 35 por el ISSSTE y 29 por el ISSSTECALI. Hay 88 pacientes confirmados a cargo de hospitales privados.
Pérez Rico informó que la cifra de pacientes dados de alta subió a 57 y se espera que en los próximos días aumente la cifra de personas recuperadas de COVID-19, debido a que hace 14 días fue cuando ocurrió un repunte en el número de casos sospechosos.
Reiteró que la única forma de evitar el contagio es quedándose en casa y adoptando todas las medidas de higiene para matar al virus. Las personas que desarrollan una actividad esencial y se ven en la necesidad de salir a la calle, deben mantener el distanciamiento social y exigir que en las empresas se respete este lineamiento.
Los adultos mayores, diabéticos, hipertensos, asmáticos, son los que siguen llegando a los hospitales y son los que demandan ventiladores, porque están teniendo más dificultad para afrontar los síntomas.
“No es momento de estar haciendo fiestas, la suspensión de actividades es para resguardarnos en nuestras casas, no hay que interactuar con personas que los pueden infectar, quédense en su casa”.
