Tijuana.- Los cuerpos de los jóvenes Rubén Chávez Pérez y Kevin Alejandro Rodríguez Leyva, quienes fueron secuestrados en mayo, fueron localizados ayer enterrados en un predio ubicado en las inmediaciones de la colonia Obrera.
Al mismo tiempo que familiares y amigos de las víctimas realizaban una manifestación en Zona Río, al cumplirse tres meses de su secuestro, elementos de la Fiscalía General del Estado (FGE) revisaban el terreno localizado en una zona de invasiones, tras obtener información de que ahí habían sido enterrados.
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Rubén, de 18 años y Kevin Alejandro, de 20 años, eran jugador y entrenador, respectivamente, del equipo de fútbol americano Gorilas de la preparatoria CBTis 155 en el fraccionamiento El Rubí.
El domingo 17 de mayo se encontraban juntos en la casa de Kevin Alejandro, en la colonia Obrera, cuando un grupo de hombres armados se los llevaron a la fuerza frente a varios testigos.
Según las investigaciones que se llevan del caso, las víctimas se dedicaban a la venta de droga en esa zona y fueron asesinados por rencillas con otro narcomenudista, a quienes ambos habían golpeado debido a una deuda.
Sus cuerpos fueron identificados debido a los tatuajes y otras señas particulares. Por ejemplo, Kevin Alejandro tenía un tatuaje en el brazo derecho con la leyenda “All we need is love” y en el brazo izquierdo tenía tatuado un balón de fútbol americano con el número 42.
Los cuerpos se encontraban en estado de descomposición y fueron enterrados juntos en un terreno baldío ubicado cerca de la calle Canario, entre las colonias Oaxaca y Chihuahua, cerca de la colonia Obrera. Uno de ellos había sido sujetado de los tobillos con un lazo.
Durante meses, los familiares de los jóvenes realizaron una serie de protestas para pedir que fueran localizados, a la vez que se reunieron con autoridades de la Fiscalía General del Estado, la cual siguió realizó diligencias en por lo menos un inmueble más como parte de la investigación.
Los familiares ya fueron notificados de su localización y pudieron reconocerlos debido a la ropa y otros objetos personales como un collar, así como por los tatuajes en Kevin Alejandro.
La FGE continuará con el caso, el cual se investigará como homicidio doloso y no como desaparición, como originalmente se había levantado la denuncia.
Egresada de la Licenciatura en Comunicación de la Universidad Autónoma de Baja California. Especialidad en Periodismo Policial y Judicial de la Universidad Iberoamericana, Campus Ciudad de México. Más de 12 años en medios de comunicación de México y Estados Unidos, como Semanario Zeta, Sin Embargo o la agencia española EFE.
