Tijuana.- Un joven de 20 años, quien trabajaba como custodio de valores para la empresa Sepro Baja, falleció a raíz de disparos que recibió en la espalda y en el cuello, durante un asalto a mano armada en la tienda de abarrotes Rembao, ubicada en el bulevar Insurgentes.
Minutos después de las 5:00 de la tarde, un grupo de sujetos a bordo de un automóvil Impala gris llegaron hasta el establecimiento ubicado frente al centro comercial MacroPlaza, donde con armas se acercaron a los custodios para exigirles las bolsas de dinero.
Sin embargo, se dio un intercambio de disparos entre los asaltantes y los custodios, quedando dos de los custodios y un civil, al parecer una víctima colateral, heridos de bala.
Mientras tanto, los delincuentes abordaron el vehículo en el que llegaron y se dieron a la fuga hacia la Rampa Cetys Universidad.
En esa vialidad, en la esquina con calle Laguna Maynar, abandonaron el automóvil para luego abordar una camioneta Ford Explorer negra, en la cual se dieron a la fuga.
Tanto los dos custodios como el civil fueron trasladados en ambulancias de la Cruz Roja a hospitales de la ciudad.
Sin embargo, Joshua Emmanuel fue declarado sin vida tras ser atendido por personal del área de Urgencias de la Clínica 1 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), alrededor de las 6:30 de la tarde.
Su compañero, de 49 años, así como un hombre de 22 años se encuentran hospitalizados.
Informes preliminares indican que los responsables son tres hombres, quienes lograron llevarse una bolsa de dinero, cuyo monto aún no ha sido especificado.
En el vehículo abandonado por los delincuentes, policías municipales localizaron un arma de fuego y un cargador. El automóvil presentaba además orificios producidos por disparos.
En el estacionamiento de la tienda Rembao, oficiales encontraron además dos armas de fuego tipo escuadras, a unos metros del vehículo tipo pick-up de la empresa Sepro Baja, a la cual pertenecen los custodios.
Debajo de una de las llantas del vehículo y a un lado del mismo, fueron encontrados tres cartuchos de escopeta, el cual coincide con el tipo de armas que utilizan los custodios.
En el mismo estacionamiento, fue dejado un chaleco antibalas, entre varias manchas de sangre.
El reporte fue atendido en un primer momento por policías municipales, quienes implementaron un operativo de búsqueda y dieron con el vehículo abandonado.
Al lugar llegaron también elementos de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano para resguardar el perímetro mientras personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) inició a levantar los indicios para integrar la carpeta de investigación por este homicidio.
Hasta el momento, no se ha reportado la detención de los responsables.
