Mexicali.- Las personas con Síndrome de Down tienen predisposición a ciertas enfermedades que la Secretaría de Salud pide identificar desde el nacimiento para tratarlas.
La Secretaría de Salud de Baja California dijo que las personas con esta condición genética enfrentan ciertos padecimientos de manera más frecuente que el resto de la población.
Lo anterior, al conmemorar el Día Mundial del Síndrome Down y resaltar la importancia del cuidado de la salud física y mental de las personas con esta condición.
“El Síndrome de Down engloba varias características físicas y mentales, cuya causa es un cromosoma adicional en el par 21, por lo que se le conoce también como “trisomía 21”, explicó.
Su desarrollo mental, social y de lenguaje es distinto y a lo largo de su vida pueden presentar enfermedades cardiacas, visuales, auditivas, infecciosas, digestivas, problemas de cadera y padecimientos oncológicos.
Las alteraciones en la tiroides pueden manifestarse en enfermedades como el hipotiroidismo congénito, hipotiroidismo autoinmune, hipertiroidismo e hipotiroidismo subclínico.
La mayoría son asintomáticas, pero se debe acudir con el médico tratante, en caso de que los menores presenten caída de cabello, mucho sueño o cansancio, estreñimiento, piel seca, talla baja o ganancia de peso, recomendó la Secretaría de Salud.
Las personas que nacen con Síndrome de Down son propensas a talla baja, disminución del tono muscular, estreñimiento, defectos intestinales, cambios en el peso, enfermedad celiaquía, hipotiroidismo, reflujo gastroesofágico, trastornos de la masticación y de la deglución, entre otras.
“Aunque el síndrome no es causa directa de la obesidad y sobrepeso, existen factores que los predisponen al incremento de peso y grasa corporal, de ahí la importancia de mantener un plan de alimentación de acuerdo al estado de salud de cada persona”, observó la dependencia estatal.
“No hay una causa directamente relacionada al nacimiento de un bebé con Síndrome de Down, la edad materna se considera un factor de riesgo, en especial en aquellas mujeres por arriba de los 40 años, de ahí la importancia de llevar un control prenatal adecuado y mantenerse informados sobre esta condición”.