TIJUANA.- Tras el repunte en los contagios, en los ingresos hospitalarios, en el índice de positividad, así como en los fallecimientos por COVID-19, Baja California regresó a semáforo rojo, de acuerdo al criterio del gobierno federal.
Según los lineamientos para la estimación de riesgos del semáforo de la autoridad sanitaria federal, una vez en rojo, los espacios deberán regularse y solo se permitirán únicamente las actividades económicas esenciales.
Esta tarde se informó que a partir del 7 de diciembre y durante los próximos 15 días se mantiene el semáforo en esa coloración, pero no significa que de manera automática se implementará la Jornada de Sana Distancia, como la que se decretó a finales de marzo.
De acuerdo a la Secretaría de Salud del gobierno federal, Baja California y Zacatecas son los únicos dos estados que alcanzaron la categoría de alerta máxima, por el repunte en los contagios.
Por la mañana, el secretario de Salud en el Estado, Alonso Pérez Rico, declaró a PUNTO NORTE que el gobierno estatal tiene la facultad para decidir qué actividades se pueden restringir, a partir del cambio de semáforo.
Como estado, dijo, pueden adoptar las medidas que consideren necesarias para contener la dispersión del virus, como cerrar giros no esenciales y reducir los aforos en los esenciales, en congruencia con el semáforo rojo.
Afirmó que a lo largo de la pandemia, los titulares de las Secretaría de Economía Sustentable y Turismo, de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social y de la Secretaría de Salud del Estado, han mantenido la coordinación para preservar la salud y la economía de la población, pero quien toma la determinación final es el gobernador, Jaime Bonilla Valdez.
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“Nosotros como secretarios le planteamos el plan, lo asesoramos y él toma las decisiones en conjunto con el gobierno federal. El escenario es muy claro, todas las restricciones que se vienen, es un solo criterio, se consensa con el gobierno federal, se presenta al gobernador y se autoriza, se implementa y punto”, afirmó.
Pérez Rico recordó que la cifra de hospitalizados e intubados ha mantenido una tendencia al alza en las últimas seis semanas.
El 70% de los pacientes que están siendo intubados no sobreviven y entre los intubados hay pacientes que recaen, por lo que requieren regresar a la ventilación mecánica automatizada.
Este día fueron reportados 981 casos activos, por lo que este sábado se prevé romper la barrera de los mil casos, además de que se confirmaron 268 nuevos contagios, que son apenas una muestra del 10 por ciento de los que se someten a la prueba PCR en laboratorios estatales.
Fueron 16 decesos los que se registraron en las últimas horas en los hospitales que atienden a pacientes COVID, más la cifra no reportada de muertes en domicilios.
Pérez Rico insistió en que prevalece el ingreso hospitalario de pacientes que llegan en condiciones avanzadas de deterioro, tras pasar más de una semana con síntomas graves en sus casas, ante la negativa a acudir al hospital.
Ha habido casos en que no duran más de dos horas intubados y fallecen, por lo que pidió a los familiares que no esperen a que el paciente se agrave y no puedan hacer nada por él.
Baja California avanzó a semáforo anaranjado a mediados de julio y llegó a colocarse en semáforo amarillo a finales de septiembre y principios de octubre, de acuerdo a los criterios del gobierno federal, aunque a nivel estatal se le mantuvo en color anaranjado.
(Con información de Khiabet Morales)
