Tijuana.- Para prevenir el suicidio, hay que hablar de él y trabajar en conjunto para abatir la crisis.
Se trata de una tarea que recobra importancia ante el índice de suicidios, personas que intentan o están pensando en intentarlo ha incrementado en Baja California los últimos dos años.
En 2020, la entidad registró 97 suicidios y para el 2021, la cifra llegó a los 121.
Para este 2022, la atención de personas con riesgo de suicidio también repuntó y sin que todavía acabe el año, ya hay un 35% más de atenciones con respecto al 2021.
En el marco del Día Mundial de la Prevención del Suicidio, a conmemorarse el sábado 10 de septiembre, el Instituto de Psiquiatría del Estado de Baja California (IPEBC) ha preparado una serie de acciones para acercarse a la población con el objeto de salvar vidas.
“El aumento tiene que ver con los estragos de la pandemia, muchas personas estaban en una situación de encierro y se enfrentaron a situaciones o se hicieron más visibles al no tener distracciones externas”, dijo Tanya Solórzano, jefa estatal de Salud Mental Comunitaria del IPEBC.
La especialista comentó que han observado un incremento general a nivel nacional, tanto en suicidio como ideación suicida a causa de la pandemia.
Pero se agudiza porque todavía existen mitos alrededor de la problemática.
“Son muchos mitos: que quien dice que se va a matar, no lo hace, que el hablar del suicidio incrementa el riesgo, incluso muchos tienen miedo de hablarlo porque piensan que así lo fomentan y al contrario, hay que detectar todas las banderitas rojas, estar atentos”, dijo.
Aunque cualquier persona podría experimentar estos pensamientos, actualmente, la población más afectada en Baja California ronda entre los 18 y los 29 años.
Por ejemplo, de los 121 casos de suicidio cometidos el año pasado, 104 eran hombres y 17 eran mujeres.
Además de que la mayoría fue por ahorcamiento y solo ocho, todos ellos hombres, lo hicieron con arma de fuego.
“El 80% de quienes lo consuman son hombres, pero el 80% de quienes lo intentan, son mujeres”, destacó Solórzano, del Instituto de Psiquiatría de Baja California.
Esto significa la cifra de suicidios podría parecer baja, pero hay muchos más que lo están intentando o considerándolo. Y por eso hay que estar atentos.
La funcionaria dijo que además de poner el tema en la agenda pública, el Instituto de Psiquiatría se ha dado a la tarea de capacitar al personal médico, de todas las instituciones, en la materia.
Lo anterior, debido a que si bien en el Instituto dan 76 mil consultas anuales, de las cuales el 26% son por trastornos afectivos y 5 mil 500 consultas de emergencia son por depresión o pensamientos suicidas, muchas personas no llegan a este lugar.
“Algunas van al Hospital General o Cruz Roja, otros no llegan siquiera a tener atención”, reconoció.
Por ello, han reforzado esta especialización entre el sector médico.
También refirió que las doce Unidades de Especialidades Médicas en Centros de Atención Primaria en Adicciones se reconvertirán en Unidades de Salud Mental.
“Nuestro interés es acercar los servicios a toda la población y que sean accesibles”, explicó.
Además está la Unidad de Atención Externa en la colonia Francisco Villa, de Tijuana, para la población que tenga algún pensamiento o requiera tratamiento.
El mensaje de apoyo no nada más es para quien esté pensando en el suicidio o lo haya intentado, sino para quienes están alrededor.
“Es importante estar atentos porque la ideación o pensamiento suicida es una situación multifactorial, factores emocionales, familiares, económicos, laborales, sociales y como familia hay que estar atentos”, dijo la jefa de Salud Mental Comunitaria del Estado.
Si escuchan a una persona hablar sobre querer quitarse la vida, detectar un sentimiento de desesperanza o que la vida no tiene propósito, es una alarma importante.
También una tristeza persistente, cambios de humor drásticos, enojo, irritabilidad o cambios en la alimentación y el sueño.
“Es importante acercarnos a nuestro familiar, tener una escucha abierta, sin prejuicios y sobre todo, cuando detectamos eso, acercarnos para buscar atención psicológica o médica”, enfatizó la especialista.
El Instituto de Psiquiatría del Estado de Baja California tiene a disposición de la población la Línea de Apoyo Emocional 075, también sus instalaciones o la Unidad de Consulta Externa en la colonia Francisco Villa.
“También se pueden acercar a cualquier unidad de salud, Cruz Roja, Hospital General, centros de salud”, agregó Tanya Solórzano.
Lo importante es no callarlo, hablarlo y buscar ayuda.