Tijuana.- El avance a semáforo amarillo no es la salvación inmediata del sector comercio, que tardará por lo menos un año en recuperarse de la afectación económica generada por la pandemia, estimó el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) de Tijuana, Jorge Macías Jiménez.
Indicó que casi todos los giros afiliados al organismo ya estaban abiertos, adaptados a la nueva normalidad, otros nunca cerraron porque fueron considerados esenciales.
El representante del sector dijo que lo que cambia con la nueva colaración es que pueden aumentar el aforo, algunos hasta a un 75 por ciento.
Sin embargo, tienen que esperar a que los clientes lleguen, pues persiste el temor al COVID-19 y en Tijuana todavía no inicia la vacunación para personas de la tercera edad.
“No podemos bajar la guardia todavía, queremos que la gente llegue bien protegida”, expresó.
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Los negocios que sobrevivieron, dijo que ya “aguantaron el golpe fuerte”, que fue pagar rentas y sueldos estando cerrados, sin generar ingresos.
Estimó que habrá giros que se podrán recuperar relativamente rápido, porque fueron esenciales y no cerraron, “pero los que estuvieron cerrados más tiempo sí van a batallar”.
Hay sectores como el de los salones de eventos, que con el semáforo amarillo ya pueden volver a operar, no obstante ven complicado conseguir reservaciones en el corto plazo.
Macías Jiménez reconoció que la población también está afectada económicamente, por lo que ya no es prioritaria la celebración de eventos sociales, de ahí que tendrán que diversificarse.
Según marca la nueva semaforización, sectores que estuvieron cerrados recientemente y que ya pueden reabrir son los gimnasios, centros de masajes, spas, centros deportivos.
También los bares, centros nocturnos y los salones pueden operar, a un 50 por ciento de su capacidad.
El líder de los comerciantes confió en que pueda aumentar la movilidad y el consumo, pero sin abandonar las medidas de prevención del COVID, pues un nuevo cierre o suspensión de actividades cortaría el ritmo de la economía.
