Tijuana.- El gobernador Jaime Bonilla Valdez aseguró que su administración no implementará un toque de queda ni “medidas coercitivas” conforme la entidad se acerca a las dos semanas más críticas de la pandemia, las cuales darán comienzo mañana lunes.
“La población está muy consciente de la gravedad de esta emergencia sanitaria por los riesgos de contagio por soronavirus; es la ciudadanía la que debe por sí misma adoptar las medidas preventivas para su protección y la de sus familias en los próximos días”, dijo.
En un comunicado de prensa, se explicó que el mandatario estatal cree que establecer un toque de queda alteraría de forma negativa el ánimo social entre la población.
Respecto a los retos en infraestrucrura, Bonilla Valdez reconoció que el creciente número de casos “sospechosos” y “confirmados” pone en riesgo de enfrentar insuficiencia de recursos hospitalarios, pero afirmó que hay suficientes camas, aunque faltan médicos y enfermeras y se van a contratar.
El jefe del Ejecutivo estatal aprovechó para reconocer la labor del personal médico.
Bonilla Valdez también descartó que se establezca como obligatorio el uso de cubrebocas, “yo creo que la ciudadanía de Baja California tiene la suficiente conciencia de la gravedad de la Pandemia, como para que tengamos que imponerle estas obligaciones… vivimos en un Estado que es libre y soberano, vivimos con libertades”, comentó.
Abundó en el tema al considerar que “…las acciones coercitivas, como los ́toques de queda ́, esos no funcionan… yo creo que altera mucho el ánimo de la sociedad y cambia mucho el comportamiento de mucha gente… causan más pánico… yo creo que vamos bien, sí tenemos muchos casos, pero ya expliqué porque, Tijuana es sui géneris…”.
