Tijuana.- La razón por la que el gobierno federal destinará 10 mil millones de pesos para construir un segundo piso de más de 9 kilómetros de extensión es que la empresa Grupo Caabsa, la cual había ganado la licitación para realizar la obra, desistió de continuar los trabajos.
Así lo declaró Karen Postlethwaite Montijo, titular de la Secretaría de Infraestructura y Desarrollo Urbano Territorial del Estado, a PUNTO NORTE, ayer minutos después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que en Tijuana se realizará la primera de una serie de obras en las que el gobierno federal invertirá 85 mil millones de pesos, producto de un fideicomiso de aduanas.
El domingo 17 de octubre, frente al Hospital General de Tijuana, donde el presidente cerró su gira de tres días, la secretaria Postlethwaite Montijo explicó que la intervención del gobierno federal se dio porque “el concesionario anterior se desistió de la concesión precisamente porque la inversión privada es mucha la que se requiere y el cierre financiero nunca llegó a concretarlo”.
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Añadió “ellos mismo dijeron ‘no la puedo sostener, no puedo entrarle al proyecto’. Esto es noticia de semanas, entonces el presidente al enterarse que este proyecto iba a quedar rezagado y sabe la importancia que significa para Baja California, para Tijuana, para la generación de empleo, para lo que es la obra, es muy buen apoyo para Baja California esta inversión federal”.
Grupo Caabsa es un consorcio de empresas de los sectores de construcción, inmobiliario, concesiones y servicios, con base en la Ciudad de México
El segundo piso no es un proyecto nuevo. La primera versión de la vialidad que conectará el Aeropuerto de Tijuana con la entrada a Playas de Tijuana y, a su vez, hacia la carretera escénica Tijuana-Ensenada, fue presentada durante la administración del exgobernador Francisco Vega de Lamadrid como una asociación público-privada con cobro de peaje.
Sin embargo, luego de una serie de acusaciones de corrupción, irregularidades en el contrato como una cláusula que comprometía al gobierno pagar una cuota a la empresa en caso de que no se llegara al aforo estimado, así como la contratación de una compañía propiedad del entonces senador panista, Víctor Hermosillo y Celada, la obra fue cancelada.
En abril de este año, el gobierno de Baja California anunció que la obra se realizaría, pero con una serie de modificaciones.
En lugar de ser una asociación público-privada, se llevaría a cabo con recursos aportados completamente por Grupo Caabsa, la cual ganó la licitación de la obra de manera unánime por decisión de los miembros de la Comisión Especial de Concesiones, entre ellos, el secretario general de Gobierno, Amador Rodríguez Lozano y el secretario de Economía Sustentable y Turismo, Mario Escobedo Carignan.
Para que la empresa recuperara la inversión, el gobierno le entregaría una concesión para cobrar un peaje estimado en 25 pesos por usuario.
En abril, durante la presentación del proyecto en la zona conocida como el Cañón del Matadero donde entroncan los accesos a Playas de Tijuana, el libramiento Rosas Magallón y El Soler, incluso se pudo observar maquinaria de la empresa.
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En dicha presentación, se especificó que la obra requeriría de una inversión de 5 mil 500 millones de pesos, tendría una longitud de 9.2 kilómetros y se recorrería de principio a fin en siete minutos, además de tener puntos de entrada y salida a lo largo del trayecto.
Sobre los avances en la obra, la funcionaria estatal dijo que el gobierno de Baja California, a través de la SIDUE, ya cuenta con el proyecto ejecutivo, el estudio de impacto ambiental, el estudio costo-beneficio, entre otros documentos.
“Nosotros al no tener fondo o recurso estatal, lo habíamos estructurado para hacerlo a través de concesión. Esto quiere decir que pagabas un peaje por subirte al segundo piso y el presidente lo que acaba de anunciar es que lo va a hacer con recurso federal, no tendrá costo este segundo piso en término de pagar una cuota y la inversión va a ser 100 por ciento federal”.
La secretaria dijo que el proyecto mejorará la movilidad de Tijuana tanto para sus habitantes como para turistas, al desahogar otras vías que ya se encuentran saturadas en horas pico como la Vía Rápida Oriente, la Zona Centro y los cruces fronterizos, pues tiene gazas de incorporación en puntos como la Zona Centro, la avenida Revolución, El Soler y el aeropuerto.
Explicó que se estima que entre 40 mil y 50 mil vehículos circulen por este segundo piso en un día.
“Es un proyecto muy trascendente para Baja California, no se ha hecho en la historia una inversión tan grande, estamos hablando de arriba de 7 mil millones de pesos”.
A dos semanas de concluir el gobierno de Jaime Bonilla Valdez, la secretaria de Infraestructura dijo que entregarán a la administración federal el proyecto ejecutivo y el resto de los avances de la obra para que se pueda licitar, nuevamente, y arrancar con los trabajos cuanto antes.
Por su parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo al final de su discurso “vamos a licitar ya esa obra porque se cuenta con el proyecto ejecutivo para hacer ese viaducto elevado, vamos a licitarlo el proyecto este mismo año para empezar ya a construirlo el año próximo, desde el principio del año, y concluirlo a finales del 2023. Ese es mi compromiso con el pueblo de Tijuana”.
Egresada de la Licenciatura en Comunicación de la Universidad Autónoma de Baja California. Especialidad en Periodismo Policial y Judicial de la Universidad Iberoamericana, Campus Ciudad de México. Más de 12 años en medios de comunicación de México y Estados Unidos, como Semanario Zeta, Sin Embargo o la agencia española EFE.
