Tijuana.- En lo que sería la nueva normalidad y después de más de un año de restricciones, este domingo 11 de julio se realizó el primer evento masivo en Tijuana, donde el uso de cubrebocas fue mandatorio.
Se trata del concierto por el 132 aniversario de la ciudad, organizado por el Ayuntamiento de Tijuana bajo la supervisión de la Secretaría de Salud del Estado.
Para ello, fue necesario acatar un protocolo que obligó a todos los asistentes a demostrar que ya habían sido vacunados contra covid-19, usar cubrebocas, pasar por filtros sanitarios como la toma de temperatura y la restricción de acceso a menores de edad.
Fernanda y Alma, madre e hija, acaban de mudarse a Tijuana justo este fin de semana y de acuerdo a su experiencia en el concierto, aunque batallaron para encontrar los accesos hacia el escenario, hubo suficiente supervisión para evitar contagios de Covid-19.
“Sí vi muchos comentarios negativos en las redes, pero siento que aquí en Tijuana van más avanzados en esto, ya hay más eventos, ya casi todos están vacunados, traen mascarillas, no debería haber problemas”, expresó Alma.
Y es que las cifras más recientes de la Secretaría de Salud refieren que más del 70% de la población en el estado ya cuenta con su esquema de vacunación completo, logrando así la inmunidad de rebaño.
Aunque muchos de los asistentes contaron a PUNTO NORTE que ya tienen mayor movilidad ahora que el semáforo epidemiológico está en verde, hubo quienes aprovecharon los festejos por el 132 aniversario de Tijuana para salir por primera vez de su casa.
Es el caso de la señora Rosa Cristal Durán, quien atendió la convocatoria al concierto de Matute junto a su familia, portando un cubrebocas de lentejuelas acorde a la ocasión.
“Ya tenía un año y cuatro meses que no salía de mi casa por el Covid, entonces estoy feliz porque estoy vacunada, me estoy cuidando y aparte es un grupo que soy su fan, me encanta su música de los ochentas, entonces estoy feliz de que ya podamos estar aquí pero con sana distancia”, dijo.
La residente de la colonia La Gloria relató que debido al Covid-19, varios de sus vecinos perdieron la vida, por lo que decidió extremar precauciones y no salir ni al supermercado, ya que su condición de diabetes la hace aún más vulnerable.
“Estoy encantada, como una bebita con un juguete nuevo porque ya por fin salí y estoy bien”, reiteró, “ojalá que toda la gente se siga cuidando porque es muy importante”.
Aunque autoridades estimaron la asistencia de 18 mil personas como máximo, las áreas acondicionadas para el concierto (tanto en el estacionamiento Plaza Río, frente al Cecut y alrededor de la glorieta “Las Tijeras”) lucían a menos del 50% de su capacidad, por lo que era posible guardar una sana distancia.
