Tijuana.- Un agente de la Dirección de Inteligencia de la Policía Municipal de Tijuana y una agente de la Fiscalía General del Estado (FGE) repelieron un ataque armado logrando abatir a uno de los sicarios que dispararon en su contra.
La mañana de hoy sábado 6 de enero, a las 11:55 de la mañana, los dos policías, quienes son esposos, llegaron a su casa ubicada en la Calle Cañón Johnson de la colonia del mismo nombre, en la delegación municipal Zona Centro.
Cuando la agente bajó del asiento del copiloto de un pick-up Toyota Tacoma gris, el cual era conducido por su esposo, un grupo de sicarios a bordo de una camioneta KIA Sorento gris se detuvo frente a su vehículo.
Fue entonces que, desde los asientos traseros, uno de los pistoleros disparó contra el policía, quien se encontraba todavía detrás del volante del pick-up.
Sin embargo, el agente tomó su arma y abrió fuego en contra de la camioneta, al tiempo que su esposa, quien ya se encontraba en la banqueta, se cubrió con la puerta trasera, del lado del copiloto, y sacó su arma de su bolsa de mano.
Entre los dos agentes, repelieron la agresión, disparando en repetidas ocasiones contra los sicarios, quienes optaron por huir al no poder bajar del vehículo para continuar disparándoles.
Tras unos segundos de fuego cruzado, los delincuentes optaron por avanzar en el vehículo, del cual descendieron unos metros adelante, pero dejando abandonado a uno de ellos, quien quedó tendido boca abajo a un lado de la camioneta, a la altura de la puerta trasera del lado del copiloto.
Mientras sus cómplices huían corriendo, el hombre perdió la vida tras recibir impactos de bala en la cabeza y el pecho.
A su lado, quedó un arma larga AK-47, mejor conocida como ‘cuerno de chivo’, la cual fue utilizada por los asesinos para disparar contra los policías.
El sicario, quien vestía sudadera negra, pantalón de mezclilla y tenis negro, era de complexión regular, tez morena clara, cabello castaño rizado y tenía barba y bigote cortos.
Por su parte, la elemento de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) de la FGE trasladó a su esposo hasta el hospital Issstecali, en donde fue admitido y donde su estado de salud se reporta estable.
Ambos vehículos presentaban diversos orificios de bala. En el caso del pick-up donde viajaban los policías, la mayoría de los disparos fueron desde adentro hacia afuera, cuando el agente disparó contra sus atacantes a través del parabrisas, pero también había impactos en la carrocería, del lado del conductor.
La camioneta utilizada por los asesinos tenía impactos de bala en las puertas laterales del lado del copiloto, así como en la cajuela y el parabrisas trasero, puesto que la agente continuó disparando contra los sicarios cuando éstos avanzaban para intentar huir.
En la escena del enfrentamiento quedaron al menos 32 casquillos percutidos, tanto de las armas cortas de los policías como de las armas largas de los sicarios.
El ataque generó un intenso operativo policial en el que participaron decenas de patrullas de la Policía Municipal, la FGE y la Guardia Nacional, cuyos elementos recorrieron las calles de las colonias aledañas.
De manera extraoficial, se habla de la detención de dos hombres relacionados con el ataque de los agentes, quienes se encontraban fuera de turno al momento de ser atacados.
El caso quedó bajo investigación de la FGE.