Tijuana.- Después de reconocer que las tendencias del voto no le favorecen, Jorge Ramos Hernández aseguró que su contrincante en realidad fueron los programas sociales del gobierno federal, en una elección donde el crimen organizado jugó un papel relevante.
El candidato por la alcaldía de Tijuana de la coalición Va por Baja California hizo énfasis en los hechos violentos registrados en esta ciudad fronteriza y responsabilizó a las autoridades de no haber podido garantizar una jornada segura.
“No hay registro en la historia de la ciudad de cabezas, de muertos, asesinatos completamente intencionales hacia la campaña, mandando la vida electoral”, dijo.
Ramos Hernández indicó que si bien algunas de las casillas que registraron incidentes violentos tenían una tendencia favorable para su proyecto y que después de los mismos, no se vieron reflejados en el conteo final, el mensaje de estos hechos es mucho más grave.
“El crimen mandó señales, participó en las elecciones, tiene permiso para participar, no hay ningún detenido como ocurre, lamentablemente me parece que evidencia, y espero que no ocurra, que le esperan tiempos muy difíciles a Tijuana”, dijo a PUNTO NORTE.
“El Gobierno de Morena no está detrás, está al frente de un estado ingobernable, donde el crimen hace lo que le pega la gana y no pasa nada”, agregó.
Explicó que pese a las alianzas y respaldo con organizaciones como el sector transportista u obrero, se impusieron los recursos inyectados por la Federación en las zonas vulnerables de esta ciudad.
“Es muy pesado competir con 5 mil millones de pesos de programas sociales que se derramaron con la zona Este; yo pienso que cometí contra el programa federal del presidente, no contra una candidata, candidato o un partido”, enfatizó.
El panista fue cuestionado por los medios de comunicación sobre quién ganó la elección, a lo que respondió “lo veremos el próximo trienio”.
También hizo referencia a la falta de consenso para una candidatura de oposición única y es que en la recta final de la jornada, Ramos Hernández hizo un llamado al candidato del PES, Julián Leyzaola -de quien no se tuvo noticias en la jornada- para que declinara en favor de su proyecto y así vencer a Morena.
“Una oposición fracturada como la que estuvimos advirtiendo durante todo el proceso, es una oposición que no va a tener resultados; finalmente prevalecieron los intereses partidistas, de candidaturas individuales, más allá de hacer un cambio”, señaló.
Jorge Ramos Hernández ingresó a la sala de prensa habilitada en un salón del hotel Real Inn en Zona Río después de las 10:30 de la noche, cuando se habían computado poco más de 6 por ciento de las actas para munícipe.
Lo acompañaron su esposa Maritza Gutiérrez, el dirigente estatal del PRD, Omar Sarabia y los integrantes de su planilla, el priista David Ruvalcaba, el candidato a regidor, Ismael Estrada, la candidata a diputada local, Abril Chagoya, entre otros.
Después de concluir la conferencia de prensa, el ex alcalde saludó a todos los ahí presentes para retirarse del lugar tras concluir su participación en esta contienda electoral, la tercera en la que participa en busca de la presidencia municipal de Tijuana.
“Soy demócrata cuando gano y también soy demócrata cuando los resultados no corresponden a lo que esperaba”, dijo.
